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La profesora Lola y la profesora Miller
La profesora Lola y la profesora Miller
Última clase de la tarde en la Universidad.
Los alumnos y alumnas van saliendo del aula poco a poco mientras miran de reojo a la profesora Lola que recoge sus cosas. Lola es una profesora cuarentona, exuberante, toda curvas y cintura estrecha, morena con gafas, un precioso flequillo recto cubre sus cejas, unas enorme tetas casi se salen de una ajustada blusa roja de terciopelo la cual a su vez se mete en una ajustada falda que rodea su delgada cintura que acentúa todavía más sus curvas, uno precioso zapatos de tacón alto dan a Lola un aspecto todavía más provocador.
En la entrada del aula aparece la profesora Miller, otra cuarentona, rubia con coleta, como Lola lleva unas sexy gafas de pasta, viste como Lola, una preciosa blusa de terciopelo pero de color blanco recogen otras enormes tetazas pero Miller no lleva sostén y se le marcan los pezones, la blusa blanca se mete a su vez en un falda negra ajustada que llega hasta su cintura también estrecha como la de Lola, un bonito cinturón blanco recorre su sensual cintura, unas preciosas botas blancas cubren sus musculadas piernas hasta casi por encima de las rodillas. Los alumnos y algunas alumnas pasa junto a la profesora Miller con la boca abierta, ver a las dos profesoras juntas es todo un espectáculo, algún alumno no puede evitar mirar los pezones de Miller, ella solo tiene ojos para Lola a la que espera en la entrada de la clase.
Sebastián es el último alumno en el aula, es un joven delgado, moreno, tímido. Sebastián recoge sus cosas mientras mira de reojo a la profesora Lola. Sebastián conoce muy bien a Lola, la tiene miedo, sabe de sus gustos, todavía se masturba a veces pensando en la vez que ella le folló delante de una amiga, se dice que no puede volverá a pasar, que el es un hombre, que él debe ser el que domine. Lola mira a Sebastián, sonríe y saca la lengua lamiéndose su labio superior, Sebastián se estremece viéndola, recoge su carpeta y su mochila pasa delante de la mesa de la profesora con la cabeza baja, no mira a Lola, llega junto a la profesora Miller, mira sus pezones marcados, suspira y sale de la clase.
Miller se acerca a Lola
-¿qué pasa con ese chico, puta?-pregunta Miller a Lola sonriendo
Lola ríe
-ya lo sabes, es otro de los alumnos que me he follado- ríe Lola
-madre, mejor no pregunto, anda vamos-susurra Miller mientras con una mano acaricia la cintura de Lola
Lola agarra la mano de Miller mientras con la otra agarra un pecho de su amiga y la da un beso inocente en la mejilla.
Las dos cuarentonas salen de la clase, pasean por el pasillo casi vacío de la Universidad. En una esquina Sebastián asoma la cabeza mira a las dos mujeres, las sigue por el pasillo hasta llegar al despacho de la profesora Lola. Lola abre la puerta con llave, deja paso a Miller, la da un cachete en su culo, la rubia ríe, de repente Lola gira la cabeza y mira a una esquina del pasillo, ve al joven Sebastián, le sonríe y le guiña un ojo, Sebastián asustado se vuelve a esconder, posa su espalda contra la pared, su respiración se agita, vuelve a asomar la cabeza, Lola ya no está pero ve que la puerta de su despacho está abierta, es una invitación.
-¡no, vayas, no vayas!-se dice Sebastián mientras se acerca al despacho
Al llegar a la puerta Sebastián escucha ruidos y risas, acerca su cara a la entrada del despacho
Ante Sebastián se presenta una imagen perturbadora, ve como la profesora Lola tira las cosas de encima de la mesa de su despacho, de un empujón tumba a la profesora Miller encima de la mesa, la profesora rubia ríe mientras Lola se abalanza sobre ella y comienza a besarla, Miller se abre de piernas, sus dos preciosas piernas rodean a Lola, Sebastián ve sus largas botas blancas rodear a sus deseada profesora Lola.
-¡Dios, Dios, Dios!-gime Sebastián en la entrada del despacho
Lola magrea a Miller que no para de reír sumisa, las dos mujeres se soban sus ropas sin quitarlas. Lola le mete su larga lengua a Miller, ella la recibe, saborea a Lola mientras magrea el enorme culo de la morena profesora, las dos mujeres retuercen sus gafas de pasta una contra la otra.
De repente Lola retrocede y baja de la mesa, agarra a Miller por la cintura y tira de ella para acercarla al borde la mesa, poco a poco sube la falda de Miller, ve como ante ella aparece un precioso coño depilado.
-¡puta! no llevas bragas, no llevas sujetador, ¡cabrona! ¿quieres que los alumnos se maten a pajas pensando en ti y no en mí?-ríe Lola
Miller ríe también
-¡Dios! la de leche que echaran esos críos pensando en nosotros-ríe Miller
-¡siiii! y la de dedazos que se deben hacer muchas alumnas, ¡ja, ja, ja!-ríe Lola
Lola retrocede y se dirige a un archivo, coge su llave y lo abre, saca un arnés con un dildo metálico en forma de polla, Sebastián lo ve desde la puerta
-¡no, no, no!-gime Sebastián que se muerde una mano recordando cuando Lola le folló.
Lola deja el arnés con dildo junto a Miller mientras comienza a desnudarse, ante su amiga comienza a quitarse su falda ajusta, sus bragas rojas, su blusa roja, su sujetador rojo. Ante Miller aparece Lola en todo su esplendor, exuberante, tetona, solo con sus zapatos de tacón alto.
-¡tú puta madre, zorraaa, como me pones!-grita Miller mientras de forma casi gimnástica levanta sus preciosa piernas cubiertas por su preciosas botas blancas, se ofrece a su amiga.
Lola agita su cuerpo mientras se coloca el arnés con polla, Miller mira hipnotizada a su amiga, sus curvas moviéndose mientras sube el arnés hacia su entrepierna, mientras se aprieta las correas.
-¡puta, más que puta!-grita juguetona Miller
Lola sonríe, se pone entre las piernas en Miller, alarga una mano para desabrochar dos botones del escote de la blusa blanca de su amiga, Miller hace el amago de desabrocharse el resto.
-¡no, no te la quites del todo, me encanta como se marcan tus pechos en la tela blanca!-murmura Lola
-¡vale cariño!-gime Miller mientras provocadora se chupa un dedo y se tumba del todo en la mesa mirando al techo.
Sebastián mira el escote que asoma en la prenda blanca de la profesora Miller, dos enormes pechos parece que van a salir al aire, pero se contienen, se marcan en la tela.
-¡qué bonito busto!-piensa el joven.
-¡fóllame, fóllame de una puta vez Lola!-suplica Miller con las piernas abiertas mirando al techo del despacho de su amiga
-¡espera un momento!-murmura Lola que gira la cabeza hacia la entrada del despacho
-¡anda nene, ven aquí!-ríe Lola dirigiéndose a donde está Sebastián espiándolas
Sebastián se sobresalta, también la profesora Miller se sobresalta y deja de mirar al techo, ve al alumno que las estaba mirando, se tapa con una mano su escote abierto, Lola alarga su mano y golpea la mano de Miller para apartársela de su escote.
-¡tranquila, es de confianza! ¿verdad nene?-ríe Lola
Sebastián mira a Lola, su respiración se agita pero no se mueve
-¡tranquilo cariño!, hoy no te follo a ti, ¡anda pasa y cierra la puerta con llave!-dice Lola
Sebastián no sabe qué hacer pero poco a poco entra en el despacho si darse él cuenta, su cabeza dice no, no quiere que le vuelva a someter, pero su cuerpo se mueve solo, el joven cierra la puerta, las dos mujeres parece que le esperan, el chico de 19 años deja caer su carpeta y su mochila al suelo
-¡anda ven aquí!-ordena Lola mientras Miller mira al muchacho
El joven se acerca a las dos mujeres, ve el coño de Miller, ve el cuerpo desnudo de Lola, ve como Lola comienza a acariciar una de las botas blanca de Miller, el joven nota como su polla comienza a crecer en sus pantalones. Las dos mujeres ven como comienza a marcarse la polla del joven en sus pantalones vaqueros
-¡desnúdate ostias!-gritaa Lola
Miller se sobresalta con el grito, Lola gira la cabeza y mira a Miller, sube las dos piernas de la rubia por encima de sus hombros
-¡siiii jodeer, marchaaaa! ¡haced lo que queráis pero folladme ya, estoy en celo ostias!-grita Miller
Sebastián comienza a desnudarse mientras Lola comienza meter el dildo en el coño de Miller
Miller cierra los ojos, comienza a gemir, a encorvar su cuerpo sobre la mesa
-¡si por favor, si por favor!-gime Miller
Lola mira a la rubia tetona, aprieta los dientes, dominante, gira la cabeza y ve poco a poco aparecer el pequeño cuerpo de Sebastián, ve su bonita y gran polla dura ante ella. Lola alarga la mano y agarra a Miller por la barbilla, gira su cabeza.
-¡mírale!-ordena Lola
Miller abre los ojos y ve a Sebastián
-¡ay que mono!-gime la profesora Miller mientras sigue gimiendo con la follada de su amiga
-¿verdad que si? pues deberías verle a cuatro patas sumiso, ¡ja, ja, ja!-ríe Lola
Sebastián avergonzado se tapa la entrepierna, sus manos apenas pueden tapar su enorme rabo
-¡pero no lo cuentes señorita!-se queja Sebastián tímido
Lola sonríe al joven mientras agita su cuerpo embistiendo a Miller
-¡anda ven aquí, sujeta una pierna de esta puta!-dice Lola
Sebastián se deja de tapar, su enorme polla se agita ante las dos cuarentonas, ve los enormes pechos de las dos profesoras agitarse con las embestidas de la profesora Lola, la tela blanca de la blusa de Miller se agita, los pechos al aire de Lola le hipnotiza, el joven se acerca, Lola se quita una de las piernas de la rubia de uno de sus hombros, el chico sujeta la pierna que le pasa Lola con una mano mientras con otra mano agarra el culo de Lola.
-¡mmmmmm, eso es nene! hoy tú vas a ser el macho, magréame el culo, magrea la pierna de la rubia-gime Lola
El joven acaricia el culo de Lola mientras poco a poco acaricia con la otra mano la musculada pierna de Miller que se levanta de forma gimnástica. El joven comienza a posar su mejilla en la bota blanca, comienza a lamer el cuero blanco mientras acaricia el muslo que está ala aire entre su falda levantada y la bota, mientras comienza a frotar su enorme polla contra la pierna de la profesora Miller
-¡ay si, que caliente tiene el rabo!-gime Miller mientras Lola la sigue follando
Sebastián cierra los ojos mientras lame la bota blanca, mientras magrea el culo de Lola, mientras frota su polla contra el muslo de la rubia. De repente Lola comienza a acaricia el culito perfecto de Sebastián, el joven se despierta de su trance.
-¡no señorita, no, eso no otra vez!-suplica el joven
-¡ja, ja, ja! ¡que tranquilo cielo!es que me gusta tu culito que le voy a hacer-dice Lola
Lola saca su dildo del coño de Miller, la rubia jadea
-¡anda ven, fólla a esta sumisa, yo te enseño a ser un hombre!-dice Lola a Sebastián
Sebastián mira a Lola, ve su polla de metal colgando, ve a la profesora Miller sumisa esperando
-¡sii enséñame, enséñame!-gime el joven que se lanza a mamar una de las enormes teta de Lola
Lola ríe mientras abraza al joven que comienza a mamar su teta como si diera leche
-¡si nene!-ríe Lola mientras Miller espera su turno
Sebastián mama con violencia, turnándose entre los dos pechos mientras se masturba
-¡ay mami, ay mami!-gime el joven con voz ahogada por los pechos
Miller y Lola se miran y ríen en silencio. La rubia profesora ríe mientras ve al pequeño joven mamar los pechos de su amiga
-¡nos tienes a todos a tu merced puta!-ríe Miller
Lola ríe, poco a poco intentar apartar de sus pechos al joven, él se resiste y quiere seguir mamando
-¡mami dame leche, mami dame leche!-gime el joven medio ido
Miller abre la boca y se la tapa con su mano, ríe en silencio, Lola la mira y se encoje de hombros mientras también se ríe del chico
Lola finalmente consigue apartar al joven, nota sus pechos cubiertos de saliva
-¡bueno vale ya, guapo!-ríe Lola mientras se coloca mejor sus gafas movidas con las mamadas violentas del chico
-¡anda fóllate a mi amiga!-susurra Lola que se agarra sus enormes pechos doloridos con tanta mamada violenta.
Sebastián mira a Lola
-¡si mami!-murmura el joven avergonzado mientras se coloca entre las piernas de la profesora Miller
-¡eso es bonito!-murmura Lola que agarra la enorme polla del joven
-¡aggh!-gime el joven
-¡eh, no te corras!, ¡solo te ayuda a colocártela!-ríe Lola que sujete la polla del joven y la coloca junto al coño de Miller
-¡ahora roza la punta de tu rabo contra su rajita bulbosa!-susurra Lola
El chico obedece, Lola suelta su polla, Sebastián se agarra la polla y comienza a frotarla contra el coño de Miller, la rubia tetona laza un gemido. De repente Sebastián comienza a darse cuenta de que la profesora rubia se excita por el
-¡lo ves! ¿ves cómo se excita por ti? ¿Cómo se muestra sumisa? ¡es tuya, tuya!-gime Lola que comienza a acaricia otra vez el culito del joven, esta vez el joven no se fija en ella, comienza a fijarse en la profesora Miller, comienza a notar como se excita, comienza introducir su polla
-¡aghh, aghhh, siiiiiiiiii joder!-grita Miller
Sebastián abre la boca, se asombra con la exuberancia de la profesora Miller, el joven comienza a sentirse poderoso por primera vez, cuando follaba a sus amigas siempre se sentía cohibido, ahora se siente hombre
-¡eso es, eso es! dale lo que necesita guapo- le gime Lola al oído mientras sigue acariciándole el culo
Poco a poco el joven comienza a follarla con más violencia, aprieta los dientes, alarga una mano y tira del escote rompiendo los botones que todavía estaban abrochados, un enorme pecho sale a la vista, se agita
-¡siiiii puta!-grita Sebastián mientras magrea la teta
-¡siiiii cielo, si cielo!-grita Miller con los ojos cerrados
Mientras Lola comienza quitarse el arnés con dildo, mira la escena, sujeta el dildo de metal y comienza a metérselo en su coño, de pie junto al joven, mira su cuerpecito, le parece tan bonito, el joven no se percata que Lola se está follándo con el dilo, solo tiene ojos para Miller
-¿te gusta mi polla? ¿te gusta mi polla?-grita el joven que coge confianza por primera vez en su vida.
-¡si, si, eres muy macho!-grita Miller que con los ojos cerrados alarga una mano y acaricia el pecho del joven.
-¡sí, sí, soy un nombre!-grita el joven que acaricia las dos botas de la profesora sobre sus hombros
Miller abre los ojos mira al joven
-¡siii eres un hombre precioso, tienes una polla preciosa!-gime Miller que ve a su amiga follarse con el dildo mientras no para de mirar al joven
Miller mira a Lola con la boca abierta, se sorprende a ver como su amiga desea el joven, la dominante Lola mira al joven sumisa, nota que le gustaría que el joven la follara a él, pero se contiene, sabe que el chico todavía la tiene miedo
Lola se acerca al joven mientras se sigue metiendo el dildo, le agarra por la cintura, acaricia su pequeño cuerpo, pone su mejilla en uno de los hombros del joven, abre su boca, sus labios acarician la piel del joven. Sebastián no presta atención a Lola
-¡amor, si amor, que macho eres!-gime Lola mientras besa el hombro del joven
Lola nota que el chico solo presta atención a su amiga, se siente libre para decirle lo que quiera
-¡qué bonito eres, cuando te follaba el otro día te deseaba tanto!-susurra Lola
Miller mira a su amiga sumisa con el chico, no se lo puede creer, pero de repente vuelve en sí y la profesora Miller comienza a convulsionarse, comienza a correrse
-¡aghhhh siiiiii tu puta madre, tu puta madre!-grita la sumisa Miller
Sebastián ve como la cuarentona pierde el control y se corre ante él, con su polla todavía dentro
-¡te gusta, te gusta, toma, toma!-se pone violento Sebastián que saca su polla del coño de Miller y se la vuelve a meter con violencia varias veces
-¡cabrón, cabrón, que pollazos me das!-grita Miller con los ojos casi en blanco
Sebastián saca su polla y comienza a masturbarse, comienza a correrse en el vientre de la profesora Miller
-¡por Diosss!-gime el chico
Lola aparta sus labios del hombro del chico, ve la leche salir, coge al chico de la cintura y le gira hacia ella, las últimas gotas de semen caen en su boca, el joven abre los ojos y ve que ante él está Lola, sumisa, acariciando su cintura, con el dildo metido y colgando en su coño
-¡amor, amor, yo también te quiero!-gime Lola con la boca blanca
Sebastián mira a la profesora Lola, la ve sumisa, la oye decirle que le quiere, con su semen en su boca, con sus enormes ojos negros mirándole tras sus preciosas gafas.
-¡Dios, así si, cielo, así sí!-murmura Sebastián a Lola mientras acaricia su melena morena, mientas Lola inclina su mejilla en la mano del joven.
Lola cierra los ojos y pone su mejilla junto a la polla del chico, la da besitos, come los huevos del chico.
Miller se incorpora y sentada en la mesa alarga un brazo y agarra un hombro del chico que sigue mirando a la sumisa Lola a los pies
-¡joder! es la primera vez que me siento un hombre-suspira Sebastián
La profesora Miller posa su mejilla en el hombro del chico, la profesora Lola sigue moviendo su cara en la entrepierna del joven
-¡si amorcito, ya eres un hombre!-murmura Lola que se abraza a las piernas del joven………